(7 de julio de 2019. El Venezolano).- Para Antonio Ledezma el régimen que encabeza Nicolás Maduro es sinónimo de impunidad, un manto protector que dan para todo el mundo que cometa delitos. Por eso «las sentencias de los jueces deben responder a un fin, cueste lo que cueste. Los tribunales en la era de Chávez y ahora en la de Maduro, el que no se avenga a las líneas del proceso, recibirá plomo. Así terminan los discursos, o más bien las arengas y proclamas del jefe del conglomerado delincuencial que azota a los venezolanos», asegura Ledezma en su artículo dominical que circula por los medios de comunicación.
“¿Derechos Humanos? ¿Qué es eso, cómo se come eso? Esa charada no es de por aquí, eso es “clavo pasáo” y punto. ¿Propiedad privada? Esos documentos no tienen valides. De ahora en adelante todo es del pueblo y para el pueblo. ¿Está claro? Se acabó la explotación, ¡ya basta! Con la revolución, la tierra, el petróleo y todas, toditas, sus riquezas naturales, son patrimonio del pueblo. También del continente. De esos pueblos hermanos a los que llegará la espada de Bolívar, pero con forma de manguera para que el chorro del oro negro bañe sus predios”, precisa.
Ledezma sostiene que para desgracia de los venezolanos ese maleficio se cumplió porque arrasaron con las riquezas del país y terminaron hundiendo a los ciudadanos en una miseria sin parangón en nuestro continente, afirmando que la solución está en salir definitivamente de esas mafias que han capturado las instituciones del país cómo una fiera se aferra a la presa que caza furtivamente.
El alcalde caraqueño en el exilio dice que en el informe Bachelet se reconfirma que Maduro es responsable de un esquema que conlleva a ejecutar crímenes de lesa humanidad. Que se perpetraron más de 7 mil asesinatos relacionados con ajusticiamientos extra judiciales y es evidente que el régimen dictatorial de Venezuela estableció como patrón de conducta el uso de acciones crueles como la tortura para martirizar a los disidentes políticos hasta producir, en casos continuados, la muerte, precisa.
Asegura Ledezma en su artículo de opinión que Maduro el sábado 6 de julio hizo girar esa puerta de doble sentido o dirección donde por una salen unos pocos presos cuando le conviene «jugar con la carne humana» en las mesas de arreglos políticos y luego, por otra puerta, entran nuevos presos que son sometidos a carcelazos injustos y sin derecho a la defensa.
En ese mismo orden aseguró Ledezma que, el viernes 5 de julio el presidente Guaidó encabezó otra manifestación de calle, donde quedó muy claro que la ciudadanía está dispuesta a seguir luchando por la libertad de Venezuela, pero esperando que Guaidó escale en sus decisiones para lograr de verdad el cese de la usurpación. Recuerda que en ese nuevo informe de la señora Bachelet se describen torturas, ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias, persecuciones políticas sistemáticas y falta de acceso a la justicia que son crímenes de lesa humanidad y así deben llamarlos, pero pregunta, ¿Por qué razón no lo hacen? y al mismo tiempo pide que el gobierno legítimo de Guaidó debe hacerlo ver así, sentencia.