(23 de mayo del 2022. El Venezolano).- A tres años de la creación del Ministerio de Atención de las Aguas, en Venezuela aumentan las denuncias de contaminación de lagos, ríos y playas por causa de aguas servidas.
Especialistas, activistas ambientales y políticos coinciden en que la contaminación por aguas servidas afectará, a mediano y largo plazo, la salud de las comunidades y los ecosistemas marinos de Venezuela. Así lo destaca, a través de una nota de prensa, la ONG Transparencia Venezuela.
En al menos en nueve estados del país, señala el organismo, hay plantas de tratamiento de aguas residuales paralizadas o con fallas en su funcionamiento. En general, la infraestructura de las plantas construidas en el país quedó en el olvido; sin inversión ni mantenimiento, y a merced de la delincuencia y la opacidad.
La ONG Transparencia Venezuela alertó sobre este grave problema. Afirmó que une su voz a la de activistas ambientales exigiendo acceso a la información pública y atención urgente.
Este exhorto se genera justo cuando el gobierno chavista utiliza sus medios, en el marco del Día Internacional de la Biodiversidad, este domingo, para reiterar su “compromiso en la preservación de los ecosistemas”.
Señala la agencia EFE que Nicolás Maduro escribió en su cuenta en Twitter que “la diversidad ecológica es fundamental para salvar a la Madre Tierra”.
Pérdida acelerada de biodiversidad
No obstante, el Observatorio Venezolano de Derechos Humanos Ambientales (OVDHA) advirtió el pasado 18 de mayo que en el país hay «una pérdida acelerada de la diversidad biológica«, lo que podría incidir en la vulneración de las garantías fundamentales de poblaciones rurales e indígenas.
«En Venezuela, la diversidad biológica, y en particular la fauna silvestre, ha venido sufriendo desde hace décadas un proceso de deterioro continuo que pone en riesgo de extinción a una importante cantidad de especies», detalló la organización en su informe «Emergencia humanitaria en Venezuela y la fauna silvestre: Diversidad biológica asediada por la crisis».
El Carabobeño reseñó que en la presentación del estudio, el observatorio indicó que esta pérdida se relaciona con varias causas, entre las que están el incremento de la población humana, la desaparición de hábitats, la contaminación y la presión de la cacería.