(28 de febrero del 2022. El Venezolano).- Todo incremento salarial en Venezuela es muy nominal; solo edulcuración, pues desde 2017, cuando entramos en hiperinflación, por caída de la ptoducción petrolera, el venezolano transita por la senda de la pobreza; gana, apenas, de unos diez a once centavos de USD a diario. Pero, si lo dividimos entre las ocho hras diarias de un trabajador, obtendríamos cero/hora; algo insólito, inédito, inviable y absurdo. Nuestro salario mínimo SERÍA el equivalente a unos 1,52USD, según tasa BCV.
Escrito por Isaías A. Márquez Díaz
Constituye una pequeña muestra de la política nefasta y mediocre de NMM, contradictoria a los artículos 98 de la LT y 91 CRBV vigentes, sobre “el derecho a un salario suficiente que le permita vivir con dignidad…”.
Según el FMI, Venezuela experimenta la hiperinflación más elevada del mundo. Hacia fines de 2020 el país cumplió unos tres años consecutivos con un alza de precios de bienes, productos y servicios superior a un 50 porciento mensual. Los propios registros del gobierno nacional, que suele retrasar la publicación de data pública a la fecha, convalidan la hiperinflación. Así, el BCV cifró la inflación 2019 en un 19.906, 02 porciento; superior a unos 2.200 puntos porcentuales que la reflejada por la AN opositora , electa 2015; la de 2020, en un 2.355,15 porciento y una inflación acumulada equivalente a un 616,9 porciento.
En efecto, la hiperinflación ha pulverizado al salario mínimo, pues los niveles de inflación coinciden con una pérdida casi absoluta e integral del poder afquisitivo del asalariado venezolano, que atañe, principalmente, a empleados de la APN, tales como: maestros, médicos, obreros, además de pensionados y jubilados. No obstante, la empresa privada ante la dolarización informal o “de facto”, tan descabellada, busca otras formas de remuneración y estímulo; sobre todo, para sus profesionles, lo que incluye hasta planificación de carrera en el exterior.