(29 de enero del 2024. El Venezolano).- El Gobierno de Venezuela aceptó la invitación formulada por la delegación del Reino de Noruega, país facilitador de las conversaciones con el sector radical de la oposición, para instalar una misión de verificación de lo acordado por las partes en Barbados en octubre pasado.
«Con fecha 27 de enero de 2024, el doctor Gerardo Blyde –jefe de la delegación opositora– y mi persona, hemos recibido por parte de la delegación facilitadora del Reino de Noruega, Dag Nylander, una comunicación en la que nos sugería, en seguimiento del Acuerdo Parcial sobre Derechos Políticos y Garantías Electorales para Todos, que se conformara de manera perentoria la comisión de seguimiento y verificación«, anunció el jefe de la delegación del Ejecutivo venezolano en los diálogos, Jorge Rodríguez.
Rodríguez apuntó que tras consultas con el presidente Nicolás Maduro Moros y pese a los ataques e incumplimientos de la otra parte, se acordó hacer «un nuevo intento para mantener y sostener los postulados del acuerdo político de Barbados».
«Venezuela está lista para que sea convocada y se conforme la comisión de verificación y seguimiento de los Acuerdos de Barbados. Tenemos muchas cosas que mostrar en esa comisión de verificación», sostuvo el político, que también apuntó que en el formato participarán Noruega en su condición de país facilitador, así como los países garantes (Rusia y Francia, entre otros) y representantes de las dos delegaciones.
Compromisos fallidos
En otro comentario, el también presidente de la Asamblea Nacional venezolana enfatizó la «compulsión a la repetición» exhibida por el ala radical de la oposición, en relación con su abandono reiterado de los cauces constitucionales en favor de atajos paraconstitucionales.
La semana previa, Caracas denunció que en 2023 se fraguaron cinco conspiraciones para deponer a Maduro, pese a que las negociaciones estaban en curso y en lo pactado se estableció como condición el respeto de lo estipulado por la Constitución y las leyes locales.
A ese respecto, Rodríguez llamó a recordar que el acuerdo político suscrito el pasado octubre en Bridgetown obligaba la promoción de la autorización de inscripción de «candidatos [presidenciales] y partidos políticos, siempre que cumplan» con las condiciones establecidas por la ley.
Se refería a la ratificación de la inhabilitación para el ejercicio de cargos públicos impuesta a la dirigente opositora María Corina Machado comunicada el pasado viernes por el Tribunal Supremo de Justicia, en virtud de su presunta responsabilidad en la comisión de delitos graves contra la República, hoy bajo investigación de las autoridades.
Habrá elecciones en 2024
Frente a narrativas sobre la eventual suspensión de los comicios presidenciales, previstos para el segundo semestre de este año, avanzadas por dirigentes del sector ultraderechista de la oposición local residente en el extranjero, como es el caso del exalcalde mayor de Caracas, Antonio Ledezma, Rodríguez reiteró que el evento se celebrará en el momento que legalmente corresponde.
«Llueva, truene o relampaguee, en Venezuela habrá elecciones presidenciales en el año 2024 (…). Nosotros tenemos que respetar lo que aquí –en la Constitución– está establecido y aquí está establecido que el 10 de enero del año 2025 toma posesión el presidente de la República, debidamente electo en el año 2024 y así va a ser», insistió.
Acuerdos «heridos de muerte»
En otro punto de su comparecencia, el político socialista mencionó que, para el Ejecutivo, los Acuerdos de Barbados están en «reanimación cardiopulmonar», gracias a la conducta de ese sector, que, en su decir, «ha intentado asesinar al presidente de la República en al menos siete oportunidades».
«A pesar de eso, queremos persistir en nuestra intención de que se desarrollen adecuadamente estos Acuerdos de Barbados», destacó.
Este punto de vista fue respaldado ‘a posteriori’ por el primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela, Diosdado Cabello, quien instó a los delegados de la Plataforma Unitaria a cumplir con lo pactado.
«Cuando dicen que el acuerdo está herido de muerte, no es por nosotros. Es por los que no han cumplido. Nosotros hemos cumplido, porque dentro de la Constitución, todo; fuera de la Constitución, nada», sostuvo Cabello en una conferencia de prensa.
El parlamentario subrayó que, «a estas alturas», la Plataforma Unitaria y la dirigente opositora María Corina Machado podían decir «lo que quieran», pero que lo expresado por ellos constituirían «engaños» hacia sus seguidores, porque estaban plenamente conscientes de que los delitos por los que se les investiga constituyen violaciones de la ley.
«No nos interesan sus intenciones»
De otra parte, el vocero también se refirió a recientes declaraciones emitidas por voceros del Gobierno de EE.UU. relativas a la reimposición de sanciones, sobre la base de un supuesto incumplimiento de los Acuerdos de Barbados por parte de su par de Venezuela.
«A estas alturas, ya deberían saber que a nosotros –el Gobierno– no nos interesan sus intenciones de inmiscuirse en los asuntos que solo le competen a los venezolanos y a las venezolanas. Ocúpense ustedes de su país», fustigó.
En adenda, Rodríguez relató que pese a las acusaciones, Washington tiene un código que establece severas penas –incluyendo la de muerte y la inhabilitación para el ejercicio de cargos públicos– entre quienes promuevan la guerra contra el país o atenten de algún modo contra sus intereses nacionales.
«A estas alturas, ya deberían saber que no vamos a aceptar ningún tipo de presión y ningún tipo de injerencia. Imagínense si nosotros dijéramos: ‘no estamos de acuerdo con que sea la pena de muerte para un traidor’, imagínense qué sucedería si un político norteamericano solicitara la incursión de mercenarios o militares de países que son considerados hostiles por los EE.UU. ¿Qué pasaría? (…). No se metan en nuestros asuntos», advirtió.
Del mismo modo adelantó que desde Caracas estarían «muy atentos a las acciones» emprendidas por la Casa Blanca que pudieran ser «consideradas como agresivas» al derecho de Venezuela «a vivir en paz, a progresar y a que se levanten todas las medidas coercitivas unilaterales». «Si hay alguna acción agresiva, nuestra respuesta será serena, recíproca, y enérgica», completó.