(05 de diciembre del 2020. El Venezolano).- El Voto es más eficaz que la guerra
Los grandes problemas y conflictos del mundo se han resuelto a través de la vía electoral, por el voto. Después de la Segunda Guerra Mundial, las controversias entre los países se han solucionado y logrado la paz con la participación ciudadana y la realización de elecciones populares, donde el voto ha sido el gran actor. Caso contrario, ha sucedido cuando los países han sido intervenidos o han entrado en acciones bélicas con otras naciones, los resultados son desastrosos, ejemplos en el mundo hay demasiado.
Va a haber un nuevo elenco político
La gente no se da cuenta que en este proceso electoral van a ser elegidos un conjunto de mujeres y hombres jóvenes, que van a tener un papel protagónico en el nuevo acontecer político nacional.
Los otros se fueron, por diversas razones, pero lo cierto es que ya no se encuentran en la política nacional, la dirigencia del llamado G4, en su mayoría pasa a formar parte de un concierto internacional. Algunos rectificaron a tiempo, y por juicios ante el TSJ lograron renovar las autoridades de los partidos, y hoy están participando en el proceso electoral con candidatos propios. Otras individualidades que estaban comprometidas con la política del G4, rectificaron a última hora, y hoy las nuevas de esos partidos los aceptaron, fueron postulados y son candidatos a diputados.
Todos los políticos tienen aspiraciones legítimas, tienen la posibilidad de ser diputados, y porque desperdiciarla, si ellos ayudaron y apoyaron, les hicieron las campañas a los que salieron electos diputados el 2015. Ahora estos diputados escogieron una política, hasta este momento equivocada, así lo demuestran los resultados. Ellos abandonaron el escenario político, por las razones que hayan sido y que no analizaré hoy, pero lo cierto, es que ellos hoy no son candidatos a diputados para las elecciones de mañana domingo 6 de diciembre, y desconocen estas elecciones constitucionales. Esos espacios políticos que están dejando los diputados del 2015, serán ocupados por los nuevos diputados y serán ellos los nuevos actores. Estamos a la víspera de un nuevo elenco político.
Las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki
Si las grandes potencias, léase, Estados Unidos, Gran Bretaña, Alemania, Rusia, Japón, Francia, hubiesen profundizado en la democracia, en la creación de los organismos internacionales que nacieron después del desastre, y a través de acuerdos, tratados, hubiesen buscado resolver sus conflictos y defender sus intereses particulares, se podía haber evitado la Segunda Guerra Mundial, sobre todo teniendo ya la experiencia de lo sucedido en la Primera Guerra Mundial. Por eso abogo por la Paz y me opongo a la Guerra. Veamos estos hechos:
El 8 de mayo de 1945, Alemania se rinde ante los Aliados poniéndole fin a la Segunda Guerra Mundial en Europa. La guerra continuó en el Pacifico, los japoneses seguían resistiendo. Los Estados Unidos intensificó los ataques aéreos, el presidente de ese país, Harry Truman, ordenó lanzar dos bombas atómicas sobre dos ciudades japonesas Hiroshima y Nagasaki (el 6 y el 9 de agosto de 1945). Hecho monstruoso condenado por todos los países del mundo, con el lamentable resultado de 105.000 y 120.000 personas entre civiles y militares que perdieron la vida en las dos ciudades, y más de 130.000 heridos, la mayoría quedó lisiada para el resto de sus vidas, afectados y traumatizados por siempre. Hasta hoy estos ataques atómicos son los únicos que se conocen en la historia mundial. Había que ponerle fin a la guerra, pero escogieron el más drástico, no existían posibilidades de que los japoneses ganaran esa pelea. El 14 de agosto de ese año, el emperador de Japón, Hiroito, anunció el rendimiento total de Japón y se firmó la paz.
Pero es el 2 de septiembre de 1945, cuando realmente se le puso fin al conflicto mundial. Ese día, hace 75 años, se encontraba anclado en la bahía de Tokio el buque Missouri, donde los representantes de los Estados Unidos y Japón, firmaron los acuerdos y documentos de la rendición incondicional de Japón. Las islas del Pacifico fueron escenarios de las feroces batallas navales más grandes de la historia, en el enfrentamiento entre los Estados Unidos y los Aliados con Japón. El resultado muerte, suicidio y asesinatos de soldados japoneses y civiles, igual sucedió con los norteamericanos, ambos perdieron enormes cantidades de vidas, producto de la guerra. Al finalizar la Segunda Guerra Mundial se estima que las dos bombas atómicas acabaron con la vida de más de 250.000 seres humanos. La mayoría de los muertos fueron civiles, ajenos a ese conflicto. Que sentido tiene la guerra, para qué y a quién le sirve. A la sociedad, no lo creo.
@marioevaldez