(22 de julio del 2019. El Venezolano).- El líder socialista español, Pedro Sánchez, afronta el debate en el Congreso que puede desembocar en su elección como presidente del primer Ejecutivo de coalición en la reciente historia de España, si cuaja el acuerdo de su partido (PSOE) con la coalición de izquierda Unidas Podemos (UP).
Sánchez fue el vencedor de las elecciones generales del 28 de abril, aunque sin una mayoría suficiente, por lo que el PSOE espera cerrar un pacto con UP que le permita conservar el poder.
Después de que los socialistas calificaran UP como «socios preferentes», las relaciones entre ambos partidos se tensaron por la exigencia del líder de la coalición, Pablo Iglesias, de formar parte del Gobierno, algo que Sánchez no aceptaba y llegó a considerar que eso era el «escollo» para acordar un posible Ejecutivo de coalición.
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La renuncia de Iglesias allanó el camino, aunque las negociaciones aún no están cerradas.
Si finalmente se llega a un acuerdo, los 123 diputados del PSOE se unirían a los 42 de UP y Sánchez rebasaría los «noes» seguros de los partidos de centro, derecha y extrema derecha (PP, Cs y Vox), pero le faltaría el apoyo expreso o la abstención de otros partidos nacionalistas y regionalistas, con la vista puesta en ERC (independentistas catalanes de izquierda) y el PVN (nacionalistas catalanes).
El debate comienzó a mediodía con el discurso del candidato, Pedro Sánchez, que no tiene límite de tiempo para detallar su programa de gobierno, y por la tarde intervendrán los líderes de los grupos, que tomarán la palabra según el número de escaños, de mayor a menor, comenzando por el conservador Partido Popular (PP).
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El debate continuará mañana por la mañana y se cerrará con la intervención del portavoz socialista, antes de la votación.
Sánchez necesitará mayoría absoluta (176 votos a favor de los 350 diputados de la Cámara) y si no los consigue el jueves habría una segunda votación, en la que el candidato socialista solo necesitaría mayoría simple (más síes que noes).
Pedro Sánchez ya intentó sin éxito en marzo de 2016 su investidura como jefe del Gobierno, en aquella ocasión con el apoyo del partido liberal Ciudadanos, pero fracasó debido al voto negativo de Podemos, que ni siquiera optó por la abstención.
Finalmente, el líder socialista llegó a la jefatura del Ejecutivo tras la moción de censura que en junio del año pasado desplazó al anterior presidente, el conservador Mariano Rajoy (PP).
Con información de EFE