(01 de abril del 2022, El Venezolano).- Estados Unidos advirtió este jueves que seguirá deportando a los migrantes que entren al país de forma irregular, esté o no vigente el Título 42, una norma sanitaria utilizada hasta ahora para expulsarlos con el pretexto de la pandemia de covid-19.
«Para ser claros, las personas que crucen la frontera sin autorización legal serán colocadas de inmediato en procedimientos de deportación y, si no pueden acreditar su estancia en Estados Unidos, serán devueltas rápidamente a sus países», dijo en rueda de prensa la directora de Comunicación de la Casa Blanca, Kate Bedingfield.
Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) estudian si levantan o extienden hasta finales de mayo el Título 42, norma sanitaria utilizada por el gobierno de Donald Trump (2017-2021) y el de su sucesor, Joe Biden, con la que se ha expulsado a 1,6 millones de migrantes de forma exprés, reseñó EFE.
«Procesar a los migrantes de manera segura y ordenada»
Bedingfield dijo que se trata de «una decisión» que debe tomar el organismo sanitario, pero afirmó que la Casa Blanca se está «preparando para cualquier contingencia», incluso un aumento del flujo migratorio.
Indicó que el objetivo del gobierno de Biden es «procesar a los migrantes de manera segura y ordenada», pero también expulsar a los que crucen de forma irregular la frontera con México.
La directora de Comunicación recordó que la pobreza o la violencia en los países de origen de los migrantes no son requisitos para pedir asilo en Estados Unidos, una condición reservada para las personas que sufran una «persecución», explicó.
«Obviamente, tratar de ingresar ilegalmente a Estados Unidos conlleva consecuencias y nadie debería tomar esta decisión tan peligrosa», señaló Bedingfield, quien sustituye en las ruedas de prensa diarias a la portavoz de Biden, Jen Psaki, mientras esta se recupera del covid-19.
La funcionaria afirmó que Estados Unidos trabaja con países de la región con el fin de «brindar opciones» a la gente para que no tengan que salir de sus lugares de origen.
Biden encara la presión de los demócratas y de quienes abogan por los migrantes para que cancele el uso del Título 42 que, según los críticos, no ha contribuido a la salud pública de EE UU y no tiene justificación médica cuando ya ha pasado lo peor de la pandemia.