(22 de enero del 2023. El Venezolano).- El expresidente Donald Trump aceleró su camino hacia la nominación del Partido Republicano para las elecciones presidenciales de 2024, consolidando aún más su posición el domingo con el respaldo del influyente gobernador de Florida, Ron DeSantis. Este respaldo no solo fortaleció la posición de Trump, sino que también generó un sentido creciente de resignación entre los republicanos que esperaban frenar su avance.
La decisión de Ron DeSantis de retirarse de la carrera presidencial republicana y respaldar a Trump marcó un hito significativo en la contienda. El senador Steve Daines, jefe del brazo de campaña del GOP en el Senado, rápidamente etiquetó a Trump como «el candidato presunto» tras el anuncio de DeSantis, instando a los republicanos a unirse detrás de Trump en su búsqueda por la nominación. Este respaldo fue seguido por el representante Bob Good, quien inicialmente respaldó a DeSantis.
Durante un discurso en Iowa, Trump expresó su gratitud hacia DeSantis, destacando su generosidad al retirarse y respaldarlo. «No es fácil», reconoció Trump, elogiando a DeSantis, su esposa y su campaña. Aprovechó la ocasión para atacar a su única competidora restante en las primarias republicanas, Nikki Haley, acusándola de movilizar a independientes y aliarse con aquellos que Trump despectivamente llama «republicanos solo de nombre» (RINOs) y «Never Trumpers».
Con la salida de DeSantis de la carrera, los estrategas republicanos anticipan un panorama más desafiante para Nikki Haley. Trump ha centrado sus ataques en Haley, cuestionando su capacidad para movilizar el apoyo necesario y enfrentar la popularidad del expresidente en Carolina del Sur. El estratega republicano de New Hampshire, Mike Dennehy, sugiere que la retirada de DeSantis hace «prácticamente imposible» que Haley mantenga a Trump por debajo del 50 por ciento en las encuestas, reportaron varias agencias.
El equipo de Trump ha intensificado sus esfuerzos en Carolina del Sur, atrayendo a líderes republicanos locales para respaldar al expresidente. Aunque la retirada de DeSantis generó cierta controversia, con el respaldo del senador Tim Scott, considerado un golpe particularmente hiriente para Haley, Trump busca consolidar su posición y mostrar a Haley que ganar en su antiguo estado será una tarea complicada.
El equipo de Trump ha desafiado las predicciones optimistas de Haley sobre su desempeño en los estados y ha instado a la exembajadora a retirarse y respaldar a Trump. Los asesores advierten que una derrota contundente en Carolina del Sur sería inevitable si Haley persiste en prolongar la carrera.
Aunque DeSantis respaldó a Trump, no se informó de ninguna comunicación directa entre ambos después del respaldo. El equipo de Trump se mostró jubiloso, y el expresidente visitó a voluntarios en su sede en Manchester, sugiriendo una atmósfera positiva en su campaña.
Trump ha dirigido su campaña hacia New Hampshire, buscando terminar rápidamente las primarias y demostrar a Haley la dificultad de ganar en el estado que solía gobernar. Además, se anunció una importante recaudación de fondos en el club de Florida de Trump, con un enfoque especial en atraer a donantes que no han contribuido previamente.
Los demócratas han aprovechado la situación para retratar la contienda republicana como una lucha entre Trump y Biden. Argumentan que no hay un camino viable para Nikki Haley superar a Trump y alientan a los votantes a unirse a la campaña de Biden en las primarias demócratas.
Con el respaldo sólido de DeSantis y una sensación creciente de inevitabilidad en torno a su nominación, Donald Trump avanza con paso firme hacia las primarias republicanas, desafiando las expectativas y consolidando su liderazgo en la contienda presidencial de 2024.
