(21 de octubre del 2021. El Venezolano).-Relevante, de alerta mundial el reto de la crisis climática que afronta nuestra agroalimentación, de origen antrópico por las tierras explotadas, irracionalmente, a niveles abusivos de sobrepastoreo, lo que comporta, dificultades para la nutrición a menos que se mejore el patrón de uso de las mismas ya que los recursos de agua y tierra se están explotando a troche y moche; sin miramiento ni conciencia de su finitud, tal y como es el caso del petróleo, cuyo uso y abuso añadido a la crisis climática está generando presiones muy fuertes, que obstan la medida de consumo de los seres humanos para alimentarse, según un informe ONU; en consecuencia, ya en unos 52 países, cerca de un millón y medio de personas vive, ahora, en lugares que se tornan yermos, perdiéndose el suelo arable en recuperación entre unas diez y cien veces más rápido (desertificación), tal y como es el caso de algunos países de África occidental. Y, de Latinoamérica: El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua, cuya migración hacia la frontera México/EEUU, se quintuplicó, paralelamente, a un período de sequía, dejando a tantos sin lo esencial; algo tan inusual que los expertos observaron signos patentes por crisis climática. Y, hasta por Asia, que aunado a la pandemia impacta sobre la carestía del coste alimentario y, en efecto, la hambruna e insalubridad manifiestas.
Venezuela
La categoría de vocación de uso de la tierra en el ordenamiento jurídico venezolano está conectada, indefectiblemente, a la ordenación territorial, pues la asignación de usos a la cual llega, debe precederse mediante un proceso de valoración de esta, a fin de establecer el grado de aptitud que ofrece el territorio para la producción agropecuaria, lo que implica una traba en la ordenación territorial, aunque se dispone de varias propuestas metodológicas para evaluar la vocación de uso de la tierra.
Riesgos posibles y actuales
El IPCC asevera que de no acuciarse acciones puntuales, la crisis climática acelerará los riesgos sobre una inanición severa, y el calentamiento atmosférico podría propiciar fenómenos meteorológicos extremos, además de otras condiciones climatológicas, que activan pérdida de tierras, su degradación y desglaciación tropical.
Dimensiones y/o tendencias
Trátase de una incertitud que se configura como de carácter geopolítico ya que las concentraciones más altas de dióxido de carbono en la atmósfera, cuyos niveles aumentan por la quema de combustibles fósiles al absorberlas las plantas alimenticias y los ecosistemas, desmejoran su calidad nutricional. Ínterin, las temperaturas elevadas mermarán el rendimiento agrícola. Además, afectarán a las ganaderías bovina y caprina, para lo cual la FAO ofrece opciones. Según OMS, hasta podría relajarse la resistencia antibiótica.
Afortunadamente, China ha decidido “no más proyectos de construcción de centrales de carbón en el extranjero”.
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