(19 de junio del 2019. El Venezolano).- Brasil no pudo con Venezuela, pero el empate del partido de este martes en cero lo mantiene igual en primer lugar en el Grupo, el cual lo comparte además con Perú y Bolivia, aunque solo por la diferencia de un gol.
Pero la catarata de insultos que recibieron los jugadores en el Fuente Nueva obligará a Tite a replantearse el próximo partido. «Brasil juega mal», reconoció el diario O Globo. La “canarinha” tendrá que jugar el sábado con los peruanos, que derrotaron 3-1 a los bolivianos. Si la “verde y amarilla” pierde y Venezuela supera a Bolivia puede ocurrir la segunda catástrofe futbolística de Brasil como local en cinco años y quedarse afuera de la Copa América. No es lo más probable pero tampoco es imposible que eso ocurra.
Los diarios coincidieron en remarcar la intensidad de los silbidos que bajaron de las tribunas en el estadio de Salvador. La bronca de buena parte de los 40.000 hinchas no tuvo contemplaciones. Los que aplaudieron quedaron en minoría. Los oídos de Coutinho, Arthur, Dani Alves y sus compañeros fueron perforados por el estentóreo malestar. Lo pitidos ya habían sido fuertes ante Bolivia a pesar del 3-0. Pero lo ocurrido en el estado de Bahía tuvo otro volumen.
Defensa de Venezuela
Brasil no ganó porque su rival supo defenderse hasta el último suspiro y, también, porque le anularon tres goles, dos de ellos por el VAR, el primero a Gabriel Jesus y el otro a un Coutinho intermitente. El árbitro chileno Julio Bascuñan no dudó en aplicar el reglamento y el sentido común pese a la presión de los locales. Como módica compensación, el partido se extendió casi 10 minutos después de haberse cumplido la hora y media de juego. «De nada sirvió. Todo terminó como comenzó«, dijo el diario deportivo Lance.
La historia de cada uno de los contendientes no arrojaba duda de cuál era superior. Sin embargo, la Copa América no se gana solo con pergaminos. A pesar de sus nombres propios, Brasil estuvo lejos de llevarse por delante al conjunto que dirige Rafael Dudamel. La “vino tinto” pudo contener la avalancha. Con el correr de los minutos, los locales quedaron atrapados en su red y presos también de su falta de ideas. Coutinho, de quien se espera que dé un paso al frente y lidere al seleccionado en ausencia de Neymar, estuvo esta vez lejos de cumplir con esas expectativas.
Con información de El Periódico