(20 de julio del 2023. El Venezolano).- La situación que viven miles de migrantes que intentan cruzar la frontera de Estados Unidos y México es cada día más inhumana. Así lo aseguran personas involucradas con la seguridad y la atención médica fronteriza, específicamente de Texas.
El medio Houston Chronicle fue el primero en reportar una serie de condiciones que ordenó el gobierno local para impedir el paso de los indocumentados. Luego CNN confirmó la información a través del Departamento de Seguridad Pública de Texas que compartió unos correos electrónicos con crudos detalles del panorama.
Un médico policía, que estuvo de guardia entre el 14 de junio y el 1 de julio en la frontera de Eagle Pass, redactó estos e-mails en los que muestra una seria preocupación. El funcionario asegura que recibieron “órdenes de empujar a la gente de vuelta al agua, para que se fueran a México”.
Además de esto se les indicó que no les dieran ni siquiera agua a los migrantes, que luchan para llegar a tierra firme bajo un sol inclemente de 86 grados Fahrenheit.
“Creo que hemos cruzado una línea hacia lo inhumano. Necesitamos operar correctamente a los ojos de Dios. Necesitamos reconocer que estas son personas que están hechas a la imagen de Dios y necesitan ser tratadas como tales”, sostuvo el oficial en los correos.
Durante esos días, otros dos médicos del Departamento de Seguridad Pública de Texas pudieron atender a una niña de 4 años que se desmayó luego de que la Guardia Nacional repeliera al grupo en el que ella venía.
Otro hombre se hizo una laceración en una pierna con el alambre de púas que se les colocó a las boyas de disuasión para migrantes en el río Grande.
Además, atendieron a una mujer de 19 años que tuvo un aborto espontáneo tras quedar atrapada en uno de los alambres.