(13 de marzo del 2024. El Venezolano).- El 30 de enero de 2024, Adolfo Pereira, gobernador del estado Lara, presentó la memoria y cuenta de su gestión en 2023 ante el Consejo Legislativo de la entidad. El funcionamiento de los servicios básicos fue uno de los temas tocados por el mandatario regional.
Escrito por: Osman Rojas Durán
Según la información que recogen medios como El Impulso, el gobernador y militante del partido oficial del gobierno señaló que las sanciones y el “sabotaje eléctrico” son responsables de las fluctuaciones del servicio eléctrico. Al ser consultado por los reportes de fallas eléctricas en la entidad, ocurridas el 29 de enero, Pereira dijo:
“Lamentablemente todavía son secuelas de las medidas coercitivas y de sabotaje eléctrico que tuvimos nosotros en el año 2019. Esto sintió mucho el sistema eléctrico nacional y bueno, el lunes (29 de enero) se presentaron fluctuaciones del sistema”.
El equipo periodístico de Cotejo.info y el Observatorio Venezolano de Fake News (OVFN) fijaron su lupa en la afirmación que indica que las “fluctuaciones eléctricas son secuelas de las medidas coercitivas y del sabotaje eléctrico”, y tras el análisis del discurso público se determinó que se trata de una mentira.
De acuerdo con informes publicados por diversas organizaciones y medios de comunicación, la crisis eléctrica se originó en el año 2010, siete años antes de que apareciera la primera sanción administrativa hacia Venezuela y nueve años antes del gran apagón eléctrico ocurrido en marzo de 2019 y el cual supuestamente fue originado por un “sabotaje al Sistema Eléctrico Nacional (SEN)”, según la versión oficial.
El Observatorio de Ecología Política de Venezuela publicó en el 2018 un informe en el que sostiene que el 50% de las plantas termoeléctricas adquiridas entre 2004 y 2014 estaban inoperativas. En este sentido, una nota publicada por Bloomberg en septiembre de 2021 indica que la crisis en el SEN radica en la desinversión y la sobrecarga que hay en el país.
Para 2021 Venezuela producía unos 8.000 megavatios (MW), según la nota de Bloomberg, pero la demanda era de 10.000 MW. El déficit se mantiene este 2024, de acuerdo con expertos, por lo que los apagones son cada vez más frecuentes.
Otras estimaciones de expertos señalan que para 2023 Venezuela produjo unos 12.000 MW, pero la demanda está por encima de los 15.000 MW, según un reporte de La Prensa de Lara donde se aseguró que la región forma parte de las zonas más afectadas por el “colapso estructural del SEN”.
¿Cuál es la situación del SEN?
Según expertos, el sistema eléctrico venezolano está al borde de un colapso. Desde el mega apagón nacional que tuvo lugar en marzo de 2019 y que se extendió por 7 días en algunas zonas del país, los cortes de luz son una constante. Datos proporcionados por el Comité de Afectados por Apagones señalan que en el año 2022 se registraron 16.618 apagones, mientras que en 2021 la cifra fue de 22.978 y 178.927 fallas eléctricas.
Los registros del 2023 no han sido publicados por el Comité; sin embargo, una nota compartida por Provea señala que entre 2022 y 2023 la crisis eléctrica se agudizó superando los 230.000 apagones, pero ¿son las sanciones y el sabotaje eléctrico las causas de estas fallas del sistema como dijo Adolfo Pereira?
Datos publicados por medios de comunicación y diversas organizaciones nacionales explican que las fallas en la industria empezaron mucho antes de que se diera la primera sanción administrativa sobre Venezuela en 2017.
Bajo el título “Crisis Eléctrica en Venezuela. No es el Niño es la Corrupción”, Transparencia Venezuela publicó en mayo de 2016 un informe donde se asegura que los problemas en el SEN empezaron en el año 2010, cuando el fallecido expresidente Hugo Chávez firmó el decreto de emergencia eléctrica con el que pretendía reducir en un 20% el consumo de energía a nivel nacional. Esta medida se implementó para hacerle frente a la crisis energética que afectaba a Venezuela en ese momento.
Para el 2016, cuando ya se conocía la existencia de sanciones impuestas a funcionarios públicos venezolanos por parte del gobierno de los Estados Unidos, desde Miraflores se oficializó un programa de racionamiento eléctrico en todo el país. En un comunicado, Luis Motta, para entonces ministro de energía eléctrica, anunció que los cortes serían de 4 horas al día, mediante un cronograma preestablecido. Una estrategia similar a la implementada por el gobierno de Nicolás Maduro, luego del apagón nacional en 2019, pero en ausencia de un cronograma.
En abril de 2011, 14 meses después de haber firmado el decreto de emergencia eléctrica, el gobierno de Hugo Chávez anunció un repentino racionamiento. En junio de ese mismo año, Voz de América publicó un reportaje titulado “Venezuela agobiada por los apagones”. En el texto se menciona que para el momento había reportes de entidades que pasan hasta 12 horas sin luz.
En el 2017, año en el que se ejecutó la primera sanción a una institución pública, Luis Motta denunció ante los medios “un sabotaje eléctrico orquestado por la oposición”. En su momento fue señalado el opositor Julio Borges, quien para entonces era presidente de la Asamblea Nacional electa en 2015, como uno de los líderes del supuesto plan.
Julio Gutiérrez, presidente del Colegio de Ingeniero y Arquitectos del estado Lara, explicó -en conversación telefónica con el equipo de Cotejo.info y el Observatorio Venezolano de Fake News (OVFN)- que el principal problema del sistema eléctrico está en la desinversión y no en las sanciones.
“Hay inestabilidad en el sistema desde el año 2014 o 2015. Eso se debe a una política pública errada en materia energética que ha generado la falta de mantenimiento. Especialmente en la generación termoeléctrica”, dijo Gutiérrez.
Sin personal calificado
Venezuela sigue siendo el país de América con el sueldo más bajo. Con un salario inferior a los 4 dólares al mes, la nación sudamericana ha visto cómo las empresas poco a poco se quedan sin personal capacitado.
Un reportaje publicado en abril de 2018, once meses antes de que se produjera el mega apagón nacional, denunció que para entonces el 70% del personal calificado de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) había renunciado debido a los bajos salarios.
Para el año 2021 se estimaba que al menos 20.000 trabajadores habían abandonado sus puestos en Corpoelec y muchos lo hicieron sin presentar una carta de renuncia. Hispano Post publicó un reportaje en el que aseguraban que la empresa se vio en la necesidad de contratar nuevamente al personal jubilado.
Actualmente, la situación de la empresa sigue siendo crítica. Una nota publicada por la Verdad de Monagas indica que los trabajadores no tienen insumos para poder trabajar ni camiones para trasladarse, por lo que no pueden dar respuesta a los problemas que se presentan en el estado oriental. Esta realidad se extiende a todo el país afectando principalmente a estados fronterizos como Zulia y Táchira.
En la red social X (antes Twitter) es normal ver posicionada la etiqueta #SinLuz. En muchos de los mensajes se hace referencia directamente a Corpoelec y según algunos usuarios la empresa no responde las llamadas telefónicas.
Las sanciones y el sabotaje
De manera frecuente los voceros gubernamentales utilizan el argumento de las sanciones económicas para justificar las fallas estructurales presentes en el país.
El equipo de Cotejo.info calificó como media verdad una afirmación según la cual el 82 % de las sanciones afectan directamente al pueblo venezolano. En el texto, publicado en febrero de 2024, se demuestra que aunque las sanciones limitan la actividad económica de un país, Venezuela ya estaba en crisis antes que apareciera la primera sanción administrativa en 2017.
En el caso del sistema eléctrico pasa algo similar, hay evidencias documentadas que señalan que el sector atravesaba un mal momento antes de que aparecieran las medidas más relevantes contra la economía venezolana. Adolfo Pereira habló también del sabotaje en la industria eléctrica, pero esto no es algo nuevo. Desde 2012 (2013, 2015, 2016, 2017, 2018, 2019, 2021) se están denunciando planes desestabilizadores para acabar con la industria y justificar de alguna manera las fallas en el servicio.
Estas denuncias dejan claro que los señalamientos de sabotaje al sistema eléctrico forman parte de un discurso reiterativo por parte de los voceros del gobierno.
Conclusión
Es mentira que las sanciones y el sabotaje eléctrico son las causas de las fluctuaciones eléctricas en Venezuela, como aseguró el gobernador Adolfo Pereira.
El análisis del discurso público, elaborado por el equipo de Cotejo.info y el Observatorio Venezolano de Fake News (OVFN) arrojó que el SEN viene presentado fallas estructurales desde el año 2010.
En su momento el fallecido expresidente Chávez firmó un decreto de emergencia eléctrica para tratar de reducir el consumo. Para el año 2016, un año antes de que apareciera la primera sanción administrativa sobre Venezuela y tres años antes del apagón nacional, el gobierno de Nicolás Maduro empezó a implementar planes de racionamiento de 4 horas al día.
Expertos señalan que la desinversión juega un papel fundamental a la hora de explicar el porqué de las fallas en el sistema. Según datos de los especialistas, el país demanda unos 15.000 MW pero produce sólo 12.000 MW, lo que genera una sobrecarga en el sistema.