(17 de diciembre del 2021. El Venezolano).- “Una tierra será fecunda, un pueblo dará fruto y podrá engendrar el día de mañana, sólo en la medida que genere relaciones de pertenencia entre sus miembros.” Papa Francisco.
Cuando se escriba la historia del engaño en Venezuela, este régimen barbárico, con su Teniente Coronel y sus fariseos a la cabeza, tendrán un sitio privilegiado en el gran salón de la falsedad. Mienten sin rubor y conscientemente para justificar todos sus actos, por muy increíbles que sean. Sus lealtades no se han congregado en torno a un ideal de libertad y de independencia, sino alrededor de un egocentrismo desquiciado que no ha reparado en malear la historia, las religiones, la economía, la cultura, la política, la moral y la ética.
Escrito por: Neuro J. Villalobos Rincón
Nuestros grandes historiadores estarán recogiendo minuciosamente lo que podría ser la “Historia del engaño en Venezuela”. Un trabajo arduo por lo voluminoso, pero muy bien documentado, sin duda, que puede abarcar varios tomos. Si Pablo Neruda estuviera vivo, se moriría de la rabia al contrastar la realidad de Venezuela con su “Canto a Bolívar”. Hoy en nuestro país no hay ni paz, ni pan, ni trigo, sólo miseria, desolación y ruinas. La Patria está destruída tanto física como moralmente.
Va a ser muy difícil deslastrar el odio anidado en el corazón de los venezolanos. El daño infligido es muy grande y se ha alojado en nuestras mentes y nuestros corazones por lo que siempre se hace presente la frase atribuida a Publio Siro: “Cuidate que nadie te odie con razón”. El Chavismo y sus bandas de malhechores al insuflar el odio entre los que los siguen en contra de los que no, ha provocado una desgarradura en el amor entre los venezolanos, y, cuando temerariamente los tiranos concitan el odio en los pueblos, tardíamente se dan cuenta que la pasión generada en las masas oprimidas se vuelca contra ellos, como ya lo dijera el Dr. Alfonso Avila Mayor.
Para los verdaderos cristianos la navidad es una época de acercamiento entre todos que nos invita a enterrar la prédica del odio así tengamos mil razones para hacerlo. Tenemos que echar mano a la serenidad y la paciencia para invocar la reconciliación entre los venezolanos de buena voluntad, sobre todo con aquellos que se han dado cuenta del engaño generalizado y permanente. Pero, que los radicales del chavismo no se equivoquen y crean que el viento sigue soplando a su favor sin darse cuenta que es inminente su derrumbe existencial.
Es cierto, no los odiamos, pero tampoco los queremos, así como tampoco a los que se les han unido por ambición, interés y falsas actitudes, es decir, a los Tartufos de la política venezolana. Recuerden que los hemos adversado y combatido y lo seguiremos haciendo con la fuerza que nos da la razón y las ansias de libertad y democracia para resarcir el daño material y espiritual que han hecho a nuestra Nación.
Los estudiosos de los procesos mentales nos han dicho que la ansiedad es hija del miedo y hermana de la angustia, tengamos Fe porque la mentira no debe seguir siendo la primera fuerza que dirija al mundo. Se sabe ya que el cerebro de los embusteros no es normal, por eso y por respeto a nosotros mismos debemos gritar a todo pulmón: basta de mentiras y basta también de tanta hipocresía!
Que en la celebración de esta nueva llegada del niño Dios se avive la esperanza que alberga nuestra alma y el afecto se haga solidario junto a la Fe por un destino de paz, prosperidad y éxito para todos. Nos encontramos en el mes de enero con nuevos bríos y con luminosos amaneceres. Que Dios nos prodigue muchas bendiciones y tratemos de pasar unas navidades y recibir un nuevo año, distintos, pero, con tranquilidad y mucho amor.