(18 de abril del 2022. El Venezolano).- Un vídeo cómico distribuido por las redes sociales en Venezuela condujo a la orden de detención de la pareja que lo grabó, bajo cargos de promover el odio e incitar el asesinato de altos personajes del régimen de Nicolás Maduro.
El video, transmitido a través de Tik Tok y posteriormente por Twitter, sugiere que todos los venezolanos desean la muerte de Maduro, además de mencionar en tono de burla al Fiscal General del régimen Tarek William Saab, a la Primera Vicepresidenta de la Asamblea Nacional, Iris Varela, el ex presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, y al fallecido presidente de Venezuela, Hugo Chávez.
El domingo, Saab anunció que la fiscalía había impartido órdenes para arrestar a la pareja que había grabado y distribuido el video. Poco después anunció que funcionarios de la policía de investigaciones CICPC ya habían detenido a Florencio Gil Mata en conexión con el caso y que buscaban a la ciudadana Olga Lucila Mata de Gil, sobre quien aún pesa una orden de detención. “Dichos sujetos #instigaban al asesinato de personalidades públicas”, escribió Saab a través de su cuenta de Twitter.
El video muestra a una mujer que hacía arepas para venderlas y cuando se le pregunta qué tipo de rellenos tiene, ella menciona las distintas versiones del plato que vende, llevando cada una de ella nombres de distintos dirigentes del chavismo. Al mencionar la arepa denominada “La Viuda”, la vendedora de arepas dijo que se llamaba así en honor de la esposa de Maduro, Cilia Flores. En ese punto, la presunta cliente muestra extrañeza y comenta que Flores aún no es viuda, a lo que la vendedora de arepa responde, “bueno, pero eso es lo que todos deseamos”, reportó El Nuevo Herald.
El régimen de Maduro aprobó en el 2018 una ley dirigida a castigar a personas que critican al gobierno socialista a través de las redes sociales. Conocida como la ley contra el odio, la normativa legal establece penas de hasta 20 años de cárcel para sus infractores y autoriza el cierre de medios de comunicación y multas a empresas y medios electrónicos que distribuyan los mensajes ofensivos. La ley ha sido usada para encarcelar desde disidentes activos en las redes sociales hasta manifestantes que llevaban pancartas criticando al régimen.