(09 de junio del 2021. El Venezolano).- La pandemia por la COVID-19 afectó severamente la ingesta de alimentos entre las familias de menos recursos económicos, al punto que ya no se habla de déficit nutricional sino de malnutrición.
Este criterio fue expresado por el padre Carlos Torreiro, presidente de Cáritas Valencia, quien declaró al programa Desde La Cabina de Unión Radio, donde señaló que muchas familias por las necesidades, están sustituyendo las proteínas por los carbohidratos.
El sacerdote expresó que al consumir solo carbohidratos, las personas aumentan de peso pero no la calidad de la alimentación.
Dijo que también se está presentando la situación de que muchas familias están vendiendo enseres, que para la familia es importante, pero necesitan ingresos para poder obtener los de alimentos.
Ante esto, la iglesia se solidariza con la situación de estas familias y trata de ayudarlas mediante los distintos programas que lleva adelante Cáritas. Entre ellos el Samán, donde se atiende a niños menores de cinco años con déficit nutricional, mujeres embarazadas y lactantes.
Asimismo el programa Ollas Solidarias que se lleva adelante en muchas parroquias. Y aunque no soluciona el problema de alimentación en forma definitiva, es un gesto profético que la iglesia realiza para fomentar la solidaridad y los vínculos, como un lugar de encuentro para la fraternidad.
El padre Torreiro indicó además que a través de los bancos de medicamentos se han distribuido más de 32 mil fármacos en los últimos días, lo cual ha beneficiado a más de 1200 personas necesitadas.
Con información de El Carabobeño