(10 de octubre del 2020. El Venezolano).- La Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) han suscrito este viernes un acuerdo para ampliar las operaciones de asistencia en la esfera de la salud de los migrantes latinoamericanos en el marco de la pandemia de coronavirus.
Según los datos que manejan ambos organismos, que trabajarán junto a los países latinoamericanos y caribeños en este sentido, en el contiente americano hay más de 70 millones de migrantes que encaran «grandes» retos de falta de acceso a servicios básicos, como agua, saneamiento y salud. Esta carencia les coloca en una situación «especialmente vulnerable» en la emergencia sanitaria actual.
El director general de la OIM, António Vitorino, ha destacado una «tendencia hacia la exclusión social» de los grupos migratorios vulnerables, de manera que sus necesidades quedan «desatendidas», algo «particularmente grave» entre las mujeres, los niños, las embarazadas y los adolescentes.
En esta línea se ha expresado también la directora general de la OPS, Carissa Etienne, que ha insistido en que la pandemia de coronavirus ha «exacerbado muchas de las deficiencias» que las personas enfrentan.
«Lo migrantes tienen poco acceso al agua y saneamiento y esto no les permite seguir los principios básicos para protegerse de la enfermedad», ha subrayado. Además, muchos no tienen otra opción que el hacinamiento, tanto en las casas como en los lugares en los que pasan parte de su tiempo, ha lamentado.
Con respecto a la situación laboral de los migrantes, han señalado que es «muy precaria» o bien son desempleados porque la mayoría trabaja en la economía informal y con el confinamiento y los cierres de fronteras han perdido sus medios de subsistencia y, en ocasiones, sus viviendas, lo que los hace aún más vulnerables.
Vitorino y Etienne han aludido a la migración de grupos numerosos que desde 2018 van de América Central a México o Estados Unidos y han puesto el foco en los más de cinco millones de venezolanos que a partir de 2015 han salido de su país hacia Colombia, Chile y Perú, principalmente.
El director de la OIM también se ha referido al fenómeno del regreso de los venezolanos a su país debido al empeoramiento de sus condiciones de vida en el exterior en el contexto de la pandemia, «presionando aún más al sistema de salud de Venezuela, que de por sí está en dificultades y tiene muchas limitaciones».
Para ambos, las causas del aumento de la migración son las «desigualdades sociales y económicas, la inestabilidad política y los conflictos y desastres naturales».