(13 de julio del 2020. El Venezolano).- Colombia entró en una fase crítica de la pandemia del coronavirus con más de 140.000 casos confirmados, casi 5.000 muertos y una aceleración de los contagios que pone al país entre los seis donde más crece la COVID-19 en el mundo.
Después de más de cuatro meses de cuarentena la curva de infectados está en ascenso imparable, situación que tiene en alerta el sistema de salud de las principales ciudades donde se multiplica la demanda de unidades de cuidados intensivos (UCI).
Las cifras de contagios y fallecidos, que entre marzo y mayo mantuvieron un ritmo moderado de crecimiento, alcanzaron el viernes niveles de alarma en todo el país con un doble récord de 6.803 contagios y 211 muertes.
El país acumula ya 140.776 infectados y 4.925 fallecidos, que lo sitúan entre los de mayor crecimiento de la COVID-19 en el mundo, y los casos que siguen activos son 76.774, también de los más elevados, mientras que la cifra de recuperados (58.800) no avanza con la misma velocidad.
Pese a que con la cuarentena el Gobierno logró demorar el pico de la pandemia, tiempo que sirvió para fortalecer su red hospitalaria y evitar un colapso del sistema, ahora las autoridades prevén que lo peor está por llegar.
“En los últimos días hemos visto un crecimiento importante en el número de casos y fallecimientos, era previsible y lo habíamos dicho, por lo cual probablemente esta situación de pico la tendremos entre julio, agosto y algo de septiembre”, dijo durante una intervención el ministro de Salud, Fernando Ruiz.
Focalizar las Estrategias
La aceleración de la pandemia coincide con la reapertura casi total de las distintas actividades económicas, lo que aumenta la preocupación de autoridades y ciudadanía por el rumbo que pueda tomar la situación.
Para superar lo que se avecina el país entrará en una fase de estrategias focalizadas, sin regresar al cierre total de las ciudades, mientras sigue impulsando la reactivación de su economía.
Una medida como la anunciada el viernes por la Alcaldía de Bogotá, la ciudad con más contagios en el país, que ordenó volver a una cuarentena estricta escalada por barrios en períodos de 14 días.
Con la estrategia, que entrará en vigor a partir del próximo lunes dado el desborde de casos y muertes, las autoridades bogotanas más que disminuir los casos esperan pasar el pico de la pandemia sin que colapse la red de salud.
El ministro Ruiz valoró ese tipo de directrices porque permitirán tener “la menor afectación posible”, principalmente en la capital del país que tiene 45.039 contagios.
El Caribe desbordado
La situación es igual de preocupante en los departamentos caribeños, cuya región es el segundo foco de COVID-19 en el país.
Las condiciones en el Caribe empezaron a deteriorarse a comienzos de junio sin que las cifras hayan tenido una reducción significativa pasado un mes crítico en el que también se han saturado los servicios funerarios.
Por ejemplo, los departamentos de Atlántico, Bolívar, Magdalena, Sucre, Córdoba, Cesar y La Guajira suman más de 52.000 contagios, el 37 % del país, superando incluso a Bogotá.
El Ministerio de Salud y las autoridades de la región han fortalecido las medidas de bioseguridad para obtener resultados como los de las ciudades de Leticia o Tumaco que “ya tuvieron su pico y van en descenso, sin mermar medidas ante un posible rebrote”, explicó el ministro Ruiz.
La contención de la propagación ayudará a mejorar la situación en departamentos como Sucre y Córdoba donde se han triplicado las cifras en tan solo dos semanas y que no cuentan con la infraestructura ni el personal médico necesario para atender el desborde de la pandemia.
Medellín bajo alerta naranja
En Medellín, capital del departamento de Antioquia, donde los números empezaron a subir después de meses bajo control, las autoridades recibieron este sábado 20 respiradores para aumentar la capacidad de las UCI.
Los aparatos fueron entregados por el presidente colombiano, Iván Duque, que completó así la dotación de 50 respiradores para la ciudad en la que se han confirmado 4.328 contagios y 41 muertes, cifras que, sin embargo, son de las más bajas entre las capitales colombianas.
Según datos del Ministerio de Salud, el 27 de junio Antioquia tenía 3.873 contagiados, cifra que en los últimos 15 días se elevó a 8.451.
Por eso, el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, declaró este sábado la alerta naranja en toda la red hospitalaria de la ciudad, que tiene en total 2.942 casos activos con un porcentaje de recuperación del 33,3 % y un 0,94 % de letalidad.
Con información de El Venezolano Colombia