(25 de diciembre de 2019. El Venezolano).- Vasos y platos de plástico con hummus, guacamole, encurtidos, embutidos o empanadillas chilenas se extendieron por las mesas vestidas con navideños manteles de papel, presididas por un árbol de Navidad con decenas de regalos a los pies, en esta fiesta de pre-nochebuena.
El festejo navideño lo organizó una red de vecinos que desde hace meses se coordina para asistir a los solicitantes de asilo que acuden a las puertas de Samur Social de Madrid, muchos de ellos venezolanos, aunque esta vez se trasladaron a un local cedido, donde invitaron a un centenar de niños y adultos que no pueden pasar las fiestas en su país de origen.
Yusnelly, venezolana que ingresó en Cruz Roja el 25 de noviembre, vive junto a su familia en uno de los centros de acogida que hay en la provincia de Madrid, del que partieron el 24 de diciembre, para vivir esta cita que es un gozo.
Ya que estamos lejos de la familia, pues hacemos familia acá. No es fácil estar lejos de casa y por las necesidades, esto es lo que nos ha tocado vivir, dice a EFE Yusnelly, mientras culminaba los preparativos de este día de compartir que agradece a los vecinos.
Una de esas vecinas es Carol, que llegó con sombreros de Papá Noel y explica que con esta comida se pretende que los solicitantes de asilo tengan el derecho a celebrar un día tan especial como es la Navidad.
La comida estuvo amenizada con música, y después, los renos de Papá Noel llegaron para repartir los regalos.
Estas personas tendrían que estar protegidas tanto por el gobierno local como estatal y están totalmente desprotegidas. Lo único que estamos haciendo es unirnos para darles soporte en todo lo que podemos, comentó la voluntaria.