(20 de octubre de 2019. El Venezolano).- El presidente chileno, Sebastián Piñera, buscaba este domingo convocar voluntades de otros poderes del Estado para lograr un acuerdo que frene las violentas protestas en varias ciudades del país, que han dejado al menos ocho muertos, cuantiosas pérdidas y restricciones de movimiento a la población civil.
El mandatario, un millonario empresario, dio pie atrás el sábado al alza del pasaje del tren subterráneo que detonó las manifestaciones en la capital y luego en otras ciudades.
Pero el toque de queda, que se aplicó en Santiago por primera vez desde el fin de la dictadura de Augusto Pinochet, no detuvo las acciones de fuerza durante la noche del sábado y domingo, con nuevos incendios en las estaciones del metro y masivos saqueos de supermercados y tiendas.
El mandatario conservador se reunió con los jefes de los poderes legislativo y judicial en el palacio de La Moneda, a escasas cuadras del neurálgico punto de Plaza Italia donde el ejército desplegaba a esa misma hora tanquetas y soldados para contener las protestas.
«El tiempo hoy día nos obliga a recuperar la tranquilidad y la paz social (…). Creo que este acuerdo nacional, que debemos buscar por la buena y sana convivencia social, es la primera urgencia», dijo Iván Flores, presidente de la Cámara de Diputados en una conferencia de prensa acompañado por Piñera.
Chile es conocido por tener una de las economías más estables de la región, pero presenta importantes niveles de desigualdad que han motivado movimientos de protestas por el acceso sesgado a educación de calidad, pensiones insuficientes y bajos salarios. Sin embargo, hasta ahora ninguna demanda había terminado en una revuelta como la del fin de semana.
El jefe militar designado por Piñera para resguardar la seguridad en la capital, Javier Iturriaga, ordenó un nuevo toque de queda para la noche del domingo desde las 7:00 p.m. hora local (2200 GMT).
Pese al incio de la restricción, muchos manifestantes permanecían en las calles, provocando algunas escaramuzas con las fuerzas de seguridad.
Autoridades informaron la muerte de tres personas en incendios en locales saqueados, un herido de gravedad por quemaduras y dos baleados en controles militares. Además fallecieron otras cinco personas en un incendio de una bodega de ropa interior.