(12 de septiembre de 2019. El Venezolano).- La Corte Suprema de Estados Unidos autorizó la aplicación en todo el país de una nueva norma del gobierno del presidente Donald Trump que impide a la mayoría de los migrantes centroamericanos solicitar asilo.
La orden de los magistrados del miércoles por la noche anula temporalmente un fallo de una corte de menor instancia que había bloqueado la nueva política de asilo en algunos de los estados fronterizos con México. La política pretende negar el asilo a cualquier persona que pase por otro país hacia Estados Unidos sin solicitar protección allí primero.
La mayoría de quienes cruzan la frontera son centroamericanos que huyen de la violencia y la pobreza en sus países. De acuerdo con la nueva regla, la mayoría de ellos no podrán pedir asilo en Estados Unidos, al igual que los solicitantes de África, Asia y Sudamérica, que llegan con regularidad a la frontera con México.
El cambio revierte décadas de política estadounidense. El gobierno ha sostenido que desea reducir la disparidad entre los exámenes iniciales de asilo, que la mayoría de los solicitantes aprueban, y las decisiones definitivas en que el beneficio es denegado a la mayoría de las personas.
“La Corte Suprema de Estados Unidos concede una GRAN VICTORIA para la frontera sobre el asilo”, tuiteó Trump.
Las magistradas Ruth Bader Ginsburg y Sonia Sotomayor expresaron su desacuerdo con la orden del máximo tribunal, reseñó AP.
“Una vez más, el Poder Ejecutivo ha emitido una norma que busca anular las prácticas de larga data con respecto a los refugiados que buscan resguardarse de la persecución”, escribió Sotomayor.
La impugnación legal a la nueva política tiene una historia breve pero algo complicada. El juez federal de distrito Jon Tigar de San Francisco impidió que ésta entrara en vigor a fines de julio. Un panel de tres jueces del Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito limitó la orden de Tigar para que sólo fuera aplicable en los estados de Arizona y California, los cuales están dentro de dicho circuito.
Con la decisión, el gobierno quedó en libertad de aplicar la política a los solicitantes de asilo que lleguen a Nuevo México y Texas. Tigar emitió una nueva orden el lunes que volvió a dejar en suspenso la política de asilo a nivel nacional. Al siguiente día, el Noveno Circuito limitó nuevamente el alcance de su orden.
La acción del máximo tribunal permite que el gobierno imponga la nueva política en todas partes mientras continúa procesándose el caso en contra de la política.