(04 de octubre del 2021. El Venezolano).- El gobierno izquierdista peruano anunció su intención de acabar con la «cárcel dorada» del expresidente Alberto Fujimori. Pero su hija Keiko, líder del partido opositor de derecha Fuerza Popular, asegura en entrevista con la AFP que trasladarlo a otro penal «busca atentar contra la vida» de su padre.
La fecha y destino del traslado no han sido precisados, pero la decisión es parte de una política emprendida por el presidente Pedro Castillo.
Alberto Fujimori, de 83 años de edad, es el único recluso del pequeño penal Barbadillo, ubicado en el cuartel de la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía, al este de Lima.
La inminencia del cambio le provocó una crisis respiratoria que obligó a la autoridad penitenciaria a hospitalizarlo de urgencia la noche del viernes en una clínica local donde se recupera, según sus allegados.
Desde 2007 el expresidente cumple en esa cárcel una condena de 25 años como «autor mediato» de dos matanzas en Lima a manos de un escuadrón de aniquilamiento del ejército que causó 25 muertos, en 1991 y 1992. Eran los años de plomo de la guerra contra el terrorismo en Perú (1980-2000).
A sus 46 años, casada y madre de dos hijas, Keiko recibe a la AFP en su oficina del distrito residencial de Jesús María. Varios cuadros al óleo pintados por su padre en prisión, decoran el ambiente. En ellos, aparecen ella y sus hijas.