(06 de noviembre del 2024. El Venezolano).- El expresidente Donald Trump consolidó su dominio en el estado de Florida tras vencer a la vicepresidenta Kamala Harris con un amplio margen, logrando una ventaja de 1.4 millones de votos, lo que representa más de 13 puntos porcentuales, según datos de la División de Elecciones de Florida y reportes de Associated Press. Este es el margen más amplio alcanzado por un candidato presidencial en el estado en los últimos 36 años, desde que George H.W. Bush derrotó a Michael Dukakis en 1988.
Con esta victoria, Florida reafirma su tendencia republicana. La campaña de Trump describió los resultados como un rechazo a la «desastrosa administración Harris-Biden» y un respaldo a políticas que priorizan la libertad y seguridad de los ciudadanos. En los últimos años, la llegada de nuevos residentes con inclinaciones conservadoras ha fortalecido la base republicana, la cual supera en más de un millón de votantes registrados a los demócratas, según datos del censo.
El giro de los latinos hacia la derecha
Un factor crucial en esta victoria fue el apoyo de la comunidad latina, especialmente en el sur de Florida. Trump logró ganar por primera vez en Miami-Dade, un condado históricamente demócrata y de mayoría hispana. En ciudades como Hialeah y Doral, de mayoría latina, el 75% y 60% de los votantes, respectivamente, apoyaron al exmandatario. Este respaldo se debe en gran parte a la narrativa anti-socialista del Partido Republicano, que resuena especialmente entre los votantes de origen cubano y venezolano que huyen de regímenes de izquierda en sus países de origen.
César Grajales, analista político de la organización conservadora Iniciativa Libre, destacó que la percepción de Trump como un líder fuerte y comprometido con la seguridad fue clave para atraer a los votantes latinos, quienes también se ven afectados por la alta inflación y el costo de vida. La representante María Elvira Salazar coincidió, afirmando que muchos votantes latinos prefieren políticas de inmigración más estrictas y rechazan cualquier asociación con el socialismo, un tema que se ha convertido en el pilar de las campañas republicanas en Florida.
A pesar de la sólida victoria de Trump, los demócratas no pierden la esperanza de reconquistar el estado. José Parra, estratega demócrata, indicó que el hecho de que los floridanos respaldaran enmiendas sobre el aborto y la marihuana muestra una inclinación progresista en temas específicos. Sin embargo, Parra admitió que se necesitarán varios ciclos electorales y una mayor inversión para fortalecer la organización y base demócrata en el estado, señaló El Nuevo Herald.
El enfoque de Trump para esta elección se basó en promesas de seguridad, economía y una política de inmigración estricta. Entre los partidarios de esta visión está Abel Carvajal, un joven estudiante de derecho en Hialeah, quien considera a Trump como la opción adecuada para enfrentar la inflación, reducir el costo de la vivienda y mejorar la seguridad. Para muchos como Carvajal, la administración Harris-Biden no ha logrado satisfacer las expectativas de la comunidad, y ven en Trump una oportunidad de cambio.
Con una afluencia de más de 350,000 nuevos residentes, muchos de ellos con tendencia conservadora, y el respaldo del gobernador Ron DeSantis, Florida se ha convertido en un símbolo de políticas republicanas. Los analistas ven esta victoria de Trump como un indicador claro de que el estado ha dejado de ser «pendular» y ahora representa un bastión sólido del Partido Republicano en el mapa político estadounidense.
