(29 de mayo del 2024. El Venezolano).- Un grupo de investigadores de la Universidad de Kioto y de la empresa Sumitomo Forestry (Japón) anunció este martes que completó la construcción del primer satélite de madera del mundo, informó la agencia Kyodo.
Las actuales normas internacionales exigen que los satélites reingresen a la atmósfera terrestre una vez que finalicen sus misiones, con el fin de prevenir que se conviertan en desechos espaciales. Sin embargo, los satélites convencionales plantean riesgos de contaminación del aire, debido a las partículas metálicas que se desprenden durante su reingreso.
Los responsables de desarrollar el satélite de madera, conocido como LignoSat, explicaron que los componentes de su vehículo espacial pueden quemarse por completo a su regreso a la Tierra, logrando mitigar los efectos negativos en el medioambiente.
Características del LignoSat
Se trata de un satélite en forma de cubo que mide 10 centímetros de cada lado y pesa aproximadamente un kilogramo. De acuerdo con Kyodo, el pequeño aparato fue fabricado con paneles de madera de magnolia de 4 a 5,5 milímetros de espesor, con un marco hecho parcialmente de aluminio. Además, mencionó que cuenta con paneles solares externos.
El dispositivo fue ensamblado mediante una técnica tradicional japonesa que no requiere tornillos ni materiales adhesivos. Los especialistas seleccionaron la madera de magnolia, que es resistente y altamente manipulable, después de realizar pruebas de exposición espacial en astillas de tres tipos de madera.
¿Cuándo se lanzará al espacio?
Los desarrolladores indicaron que entregarán el LignoSat a la Agencia de Exploración Espacial de Japón (JAXA) el próximo martes. Asimismo, comentaron que el satélite será enviado a la Estación Espacial Internacional (EEI) en septiembre a bordo de un cohete Falcon 9 de SpaceX, que despegará desde el Centro Espacial Kennedy, en Florida (EE.UU.).
Después, el dispositivo será arrojado al espacio desde el módulo experimental japonés Kibo de la EEI en octubre de este año. En los seis meses posteriores a su lanzamiento, los investigadores recopilarán datos relacionados con la expansión y contracción de la madera, así como de la temperatura interna y rendimiento de los equipos electrónicos del satélite.
La información recibida será utilizada para el desarrollo de un segundo ejemplar, el LignoSat-2. «Los satélites que no están hechos de metal deberían convertirse en algo común», señaló el astronauta y profesor especial de la Universidad de Kioto, Takao Doi.