(01 de octubre del 2021. El Venezolano).- Hoy, un grupo de líderes activos de la comunidad venezolana-estadounidense en los Estados Unidos ha unido fuerzas para crear el Caucus Venezolano Americano (VAC por sus siglas en inglés), que movilizará y organizará a la diáspora venezolana en los EE.UU. para impulsar, apoyar y defender una política exterior enfocada en esfuerzos humanitarios y democráticos para Venezuela, así como políticas internas efectivas que apoyen y empoderen a las comunidad inmigrante. Como organización, aprovecharemos la infraestructura existente construida por líderes y grupos de trabajo venezolano-estadounidenses para garantizar que nuestra comunidad tenga voz en la discusión, redacción e implementación de las políticas internas y externas de Estados Unidos en los próximos años.
Desde 2013, el régimen de Maduro ha sumido a Venezuela en la peor crisis humanitaria en la historia de América Latina. Según la encuesta ENCOVI realizada este 2021 por la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), Venezuela, a pesar de sus múltiples riquezas y recursos naturales, tiene a casi el 94 por ciento de su población en situación de pobreza y al 77 por ciento en pobreza extrema. Un informe de 2019 publicado por el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas, detalló las pésimas condiciones del sistema de salud del país, citando una Encuesta Nacional de Hospitales del año 2019 que encontró que entre noviembre de 2018 y febrero de 2019, 1.557 personas murieron como consecuencia de la falta de insumos en los centros de salud públicos.
Esta situación se ha agravado como resultado de la pandemia de COVID-19, con un tercio de los hospitales del país reportando no tener suministro de agua y dos tercios de ellos con un suministro intermitente. De manera similar, el 60 por ciento de los hospitales reportaron escasez de guantes y mascarillas. El 76 por ciento de los hospitales sufrió escasez de jabón y el 90 por ciento informó escasez de gel desinfectante. Esto es aún más alarmante, pues los casos de COVID-19 continúan aumentando a alrededor de 1.100 nuevos casos positivos cada día, solo alrededor del 10 por ciento de la población ha sido completamente vacunada, como resultado de la falta de planificación y acceso a las vacunas.
Los miembros del VAC, siempre y de manera absoluta, han apoyado un camino hacia elecciones libres y justas en Venezuela, buscando la promulgación de políticas para restaurar la democracia, combatir la corrupción y hacer cumplir los derechos humanos bajo la Ley bipartidista VERDAD. Para nosotros, es fundamental apartarse de la idea del uso de la fuerza. Estamos convencidos de que nuestro enfoque debe ser avanzar en todos los esfuerzos para aliviar el sufrimiento de los venezolanos dentro y fuera del país. En particular, dada la terrible situación actual y nuestra preocupación compartida por nuestros compatriotas venezolanos, nos unimos a todos aquellos que están allá, incluidas ONG y líderes sociales reconocidos, en la búsqueda de soluciones rápidas a la crisis humanitaria venezolana.
Creemos que la comunidad internacional, y en particular Estados Unidos, tiene la responsabilidad fundamental de dejar de lado la política y brindar ayuda humanitaria inmediata a la gente de Venezuela, enfocándose especialmente en aquellos que son más vulnerables y viven en la pobreza extrema. Damos la bienvenida a la reciente designación del Estatus de Protección Temporal (TPS) para más de 300 mil venezolanos que viven en los Estados Unidos, pero entendemos la naturaleza temporal de dicha política. Por lo tanto, hacemos un llamado a los miembros del Congreso para que aprueben una reforma de inmigración bipartidista que proporcione un camino hacia la ciudadanía para los beneficiarios de TPS, los beneficiarios de DACA y otros programas similares. Los venezolanos han contribuido significativamente con nuestras economías locales, estatales y federales, como dueños de negocios, empresarios, trabajadores esenciales y contribuyentes.
Nuestra comunidad necesita un camino hacia la permanencia para seguir contribuyendo con los sistemas económicos y sociales estadounidenses. ¡Creemos que el momento de actuar es ahora! Solo uniendo fuerzas y organizando a nuestra diáspora, la comunidad venezolana-estadounidense podrá desempeñar un papel activo en el retorno de la democracia a nuestro país de origen y mejorar la vida de los venezolanos que viven en los Estados Unidos. Esta organización abre sus puertas a todos para fungir como un recurso activo para todos aquellos preocupados por la crisis en Venezuela y su impacto. Como comunidad, estamos llamados a trabajar juntos para ayudar a quienes siguen en Venezuela, sufriendo los terribles efectos de un régimen totalitario.