(30 de enero del 2022. El Venezolano).- Los seres humanos en general somos optimistas, siempre nos da por pensar que con el nuevo año cambian muchas cosas para mejor y esto forma parte de nuestra esencia en la que la fe y la esperanza se renuevan como por arte de magia. Pero, también sabemos que toda acción fue en algún momento un deseo, un pensamiento que la motorizó y la convirtió en una realidad, por lo tanto no hay cambios, no hay modificaciones a los hechos si las acciones sólo quedan en deseos. En nuestra amada Venezuela, al inicio de este nuevo año 2022, la cruenta y espeluznante realidad a la que nos llevaron el mayor traidor de la historia, hoy felizmente difunto y sus desgraciados herederos, sigue dolorosamente intacta o mejor dicho, aunque parezca imposible, empeora cada segundo. Por supuesto que valoro, aporto y apoyo todas las iniciativas que se mueven desde distintos y numerosos frentes para cambiar esa realidad, a lo que me refiero es que las alimañas que usurpan el poder no cambiarán jamás su artimañosa forma de proceder, por el contrario cada momento se asesoran con los peores dictadores, totalitaristas y terroristas gobiernos y personajes del panorama mundial para blindar su hegemonía sobre nuestra gobernabilidad.
Por José Gregorio Briceño
Así que por enésima vez recuerdo a quienes renuevan sus esperanzas en una salida consensuada con la narcotiranía, que de ellos no se puede esperar sino trampas, miseria y odio por los venezolanos, estos narcobandoleros no dejarán de usurpar el poder por las buenas, de forma democrática, transparente y legítima.
Cada acción lo demuestra y arrancando este periodo legislativo, los agentes que tienen infiltrados en algunos sectores de la oposición le avisaron a Maduro que Juan Guaidó se estaba preparando para anunciar el respaldo a la convocatoria del referendo revocatorio en la sesión especial de la Asamblea Nacional electa en 2015, con motivo de la celebración del 23 de Enero de 1958; para saborear esto, se declararon en emergencia y planificaron como debían ejecutar el asalto o fraude nuevamente a la Constitución.
Así pues, se entiende la urgencia con la que que se tomó y anunció la decisión que provocará que el proceso de adhesiones a la petición de referendo se realice sin ejecutar previamente la auditoría del software y hardware que garantizará la integridad e inviolabilidad del proceso, una vez más los malandros partieron por adelantado, amarraron la trampa con su siempre sui generis «legalidad» y le dieron apenas cinco días a los solicitantes para organizar todo el proceso.
Es importante recordar que en el año 2004 en el referéndum que se le hizo a Hugo Chávez no se impuso la aberración que viola la Constitución de exigir el 20 % de las firmas por cada estado y ahora lo exigieron basado en una sentencia del año 2016 de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia quienes actúan como bufete de abogados del PSUV.
O sea, si en un estado no se recoge el 20 % se cae la activación del referendo lo que en algunas entidades es imposible de cumplir, por ejemplo, hay estados como Delta Amacuro, Amazonas en los que el 99 % de los empleados pertenecen a la gobernación y alcaldías, lo que haría imposible recogerlas.
El propio rector Roberto Picón, ha señalado que retiró su voto de la decisión por considerarla inviable :“Se tendrían que procesar cinco electores por minuto, por 12 horas, en todas las máquinas del país, sin margen de error..»
El Consejo Nacional Electoral está obligado por los artículos 6 y 72 de la Constitución de la República a facilitar el ejercicio del derecho a revocar a los funcionarios de elección popular pero como todas las instituciones públicas están secuestradas, es imposible hacer cumplir la Constitución.
Ese día cuando se restablezca la democracia hay que legislar sobre esa materia y así evitar esas descaradas trampas que fortalecen a los tiranos.
Desde la cárcel del exilio no veo nada nuevo bajo el sol con respecto a esta gentuza, solo piensan en trampas y vericuetos, refuerzo mi creencia de que para sacarlos del poder, hay que fortalecer la unidad y apoyar cualquier camino, sea cual sea diferente de acordar con ellos diálogos de sordos, lo imprescindible es execrarlos de cualquier forma que garantice que podamos devolver a mi gente la dignidad de vivir en paz, con trabajo, servicios, una vida ciudadana próspera, con un futuro cierto y de progreso para nuestros descendientes.
No dejo de soñar y actuar cada instante para que ese deseo, ese pensamiento sea una realidad, especialmente los denuncio sin pausa y con lo único que me queda LA PLUMA Y LA PALABRA