(29 de noviembre del 2019. El Venezolano).- Donald Trump, presidente de Estados Unidos, hizo una visita sorpresa este jueves a Afganistán por primera vez en su mandato y anunció la reanudación del diálogo de paz con los talibanes.
El anuncio ocurre casi tres meses después de romper las negociaciones con el grupo insurgente, luego de un atentado en Kabul.
Trump estuvo tres horas y media en la base aérea estadounidense de Bagram. Allí se reunió con los soldados y con Ashraf Gani, el presidente afgano.
«Los talibanes quieren llegar a un acuerdo. Nos estamos reuniendo con ellos«, dijo Trump durante su encuentro con Gani.
Negociación suspendida
El mandatario estadounidense confirmó la reanudación de un diálogo que él mismo suspendió bruscamente a comienzos de septiembre.
La suspensión se debió a un ataque terrorista en Kabul que acabó con la vida de 11 personas, entre ellas, un soldado de Estados Unidos. Los talibanes se atribuyeron el atentado.
«No me gustó lo que hicieron al matar al soldado, era un soldado estadounidense, de Puerto Rico«, recordó Trump.
Sin embargo, dijo que decidió mantener el diálogo hasta que haya un acuerdo.
«Ellos no querían comprometerse a un alto el fuego, pero ahora sí quieren. Creo que eso es lo que va a pasar», expresó.
Antes de romper las negociaciones, el mandatario estuvo a punto de recibir a los líderes talibanes y a Gani en la residencia presidencial estadounidense de Camp David. Esta idea, no obstante, generó mucha polémica en Estados Unidos.
Objetivos
Trump confirmó este jueves que su objetivo es reducir a 8.600 el número de soldados estadounidenses en Afganistán. Actualmente, son casi 14.000.
Se trata del mismo objetivo de reducción de tropas al que apuntó durante las últimas negociaciones con los talibanes, que insisten en que la retirada de las tropas estadounidenses es fundamental para alcanzar un acuerdo con Washington.
Viaje secreto
El mandatario aterrizó de noche en Bagram, la principal base aérea estadounidense en Afganistán. Dio un breve discurso ante las tropas en un hangar, antes de compartir con algunos de ellos el tradicional pavo de Acción de Gracias, festividad que se celebra este 28 de noviembre en Estados Unidos.
«Es una zona peligrosa y quiere apoyar a los soldados», dijo a los periodistas la portavoz de la Casa Blanca, Stephanie Grisham.
Para mantener el secreto sobre el viaje, Trump fue el martes a Florida para supuestamente pasar la fiesta de Acción de Gracias en su club privado de Mar-a-Lago.
Allí dejó aparcado uno de sus dos Air Force One y voló en secreto el miércoles por la noche de regreso a la base aérea Andrews, en las afueras de Washington.
Embarcó en su otro avión presidencial junto a una docena de periodistas que no supieron el destino al que se dirigían hasta unas dos horas antes del aterrizaje.
Con información de EFE