En las personas que desarrollarán Alzheimer se empiezan a acumular grupos dañinos de proteínas en sus cerebros hasta 20 años antes de que comiencen a presentar los síntomas más característicos del trastorno como la pérdida de memoria o la confusió, reportó Infobae.
Por esta razón, investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington en San Luis, Misuri desarrollaron un análisis de sangre a partir del cual se busca detectar esos cambios cerebrales de manera temprana.
Por medio de un artículo publicado en la revista especializada Neurology, los investigadores informaron que es posible medir los niveles de proteína beta amiloide en la sangre y utilizar dichas mediciones con el fin de predecir si la proteína se ha acumulado en el cerebro.
Esto resulta importante pues, de acuerdo con el estudio, cuando los niveles de amiloide en la sangre se combinan con otros dos factores principales de riesgo como los son una edad mayor a 64 años y la presencia de la variante genética APOE4, es posible identificar a las personas con cambios cerebrales tempranos de Alzheimer con un 94% de precisión.
Información del portal especializado en salud, Medline Plus, el Alzheimer es un trastorno cerebral que afecta las partes que controlan el pensamiento, la memoria y el lenguaje. Las personas que lo padecen pueden tener problemas para recordar cosas que ocurrieron de manera reciente o incluso los nombres de las personas que conocen.
Con el paso del tiempo, las afectaciones que conlleva el trastorno empeoran e incluso las personas llegan a no reconocer a sus familiares o tener dificultades para hablar, leer o escribir. En la etapa más avanzada, la gente requiere de cuidados totales, ya que pueden volverse ansiosos o deambular por zonas alejadas de sus hogares.
Para los científicos, el hallazgo representa un paso importante para el desarrollo de la medicina, pues esta prueba puede llegar a ser más sensible que el estándar de oro para detectar el comienzo de la deposición de placas amiloides en el cerebro, el cual es el escáner cerebral a través de una tomografía por emisión de positrones (PET).
De acuerdo con información de la Universidad de Washington, el análisis de sangre podría estar disponible en los consultorios médicos en los próximos años, pero agregan que sus beneficios serán mayores cuando existan tratamientos para detener el proceso de la enfermedad y prevenir la demencia.