(11 de marzo del 2024. El Venezolano).- Continúa escalando la polémica tras los dichos del canciller venezolano Yvan Gil, quien aseguró que el Tren de Aragua “no existe” y que se trata de una “invención mediática”. La ministra del Interior, Carolina Tohá, calificó de “inaceptables” las declaraciones de Gil y la tarde de este martes, los diputados miembros de la comisión de Relaciones Exteriores reprocharon transversalmente la ausencia del embajador de Venezuela en Chile, Arévalo Enrique, quien estaba citado al Congreso para dar explicaciones pero no llegó a la reunión.
En medio de la controversia, la diputada oficialista Marcela Riquelme (IND-FA) dijo que los dichos del canciller venezolano son “una falta de respeto para con las autoridades y el trabajo que se ha sostenido por parte de nuestro país. Sabemos la gestión que se ha hecho por parte de Interior, con la destinación de cuantiosos recursos que superan los mil 500 millones de dólares anuales para mejorar la seguridad, las acciones que se han debido adoptar en el norte del país por los delitos de alta connotación pública, etc. En ese sentido, creo que el Gobierno debiese evaluar – como se ha hecho en otros casos-, enviar una carta de amonestación por los dichos del canciller, quien emplazó una supuesta operación para desacreditar a Venezuela, lo que no es efectivo”, según reza una nota de Emol.
Por su parte, el diputado Tomás de Rementería (IND), señaló que el canciller de Venezuela “desconoce la realidad, sabemos que hay un grupo que se llama Tren de Aragua (…) en Chile, Perú, Bolivia, Brasil. Es un grupo de delincuencia transnacional y obviamente entiendo que el canciller venezolano quiera desconocerlo, porque además sabemos que hay ciertos nexos con grupos afines al Gobierno venezolano”, reportó Infobae.
Los diputados de la Unión Demócrata Independiente (UDI), Cristián Labbé y Cristián Moreira señalaron que “lo grave de sus expresiones es haber insinuado que los supuestos integrantes del Tren de Aragua serían chilenos, aparentemente por su acento. Por eso es que esperamos que la Cancillería de nuestro país reaccione como corresponde, porque ningún gobierno debería dejar pasar por alto una imputación de esta naturaleza”.
En esa línea, apuntaron a que “lo mínimo es que el Ministerio de Relaciones Exteriores exprese su malestar”. Además, invitaron al Ministerio Público a que puedan dar a conocer los distintos casos donde está involucrada la banda criminal.
El canciller venezolano Yvan Gil aseguró que el Tren de Aragua «no existe» y que es un «invento mediático».
Mientras tanto, el diputado Diego Schalper (RN) planteó que “ya ha habido demasiada condescendencia por parte de los distintos gobiernos latinoamericanos frente a una dictadura que se ríe de las víctimas de Latinoamérica. Por lo tanto, el Gobierno lo que tiene que hacer es llamar al embajador, pedirle rendición de cuentas, no solo por esto, sino que por muchos otros episodios. Llegó el momento que el gobierno de Chile demuestre su compromiso con la democracia”.
“Vamos a exigirle al gobierno más fuerza, que llame al embajador a Venezuela a informar y que en definitiva tengamos una postura lo suficientemente estricta con un régimen que se está riendo de las democracias y de las víctimas de Latinoamérica”, agregó Schalper.
Finalmente, el diputado Luis Sánchez (Republicano), sostuvo que “el estilo comunicacional de la dictadura venezolana no es nada nuevo, lo hemos visto cuando ellos afirmaron no tener nada que ver con el asesinato del teniente coronel Ojeda en Chile, una cuestión que por supuesto yo creo que entra en conflicto con toda lógica. Pero más allá de eso, lo han dicho todas nuestras instituciones, lo ha afirmado la Ministra del Interior, lo ha afirmado también el Director General de la PDI, la presencia del Tren de Aragua en Chile y de organizaciones criminales de origen en Venezuela y en otros países latinoamericanos es una realidad en nuestro país, una realidad que estamos combatiendo, una realidad que hay que abordar con leyes más duras. Necesitamos la colaboración de fiscales, de los jueces, todas estas personas tienen que estar tras las rejas y aquí no podemos ni siquiera entretener cinco minutos de nuestra atención con las barbaridades que dice el representante de una dictadura dentro de nuestro continente”.