El Servicio Secreto está reforzando la seguridad en torno al expresidente Donald Trump, dijo el lunes un funcionario de la agencia, tras el aparente nuevo intento de asesinato apenas dos meses después de ocurrido otro en un mitin de campaña.
«Dados los acontecimientos recientes, el Servicio Secreto está adoptando una postura más estricta en la protección del expresidente», dijo el funcionario.
Las nuevas medidas parecieron ser visibles el lunes cuando Trump bajó de su avión en Pensilvania y un agente del Servicio Secreto lo siguió de cerca.
La seguridad se reforzó tras un incidente en el campo de golf de Trump en West Palm Beach, Florida. Los fiscales federales acusaron recientemente a Ryan Wesley Routh, de 58 años, con relación a un aparente intento de asesinato contra Trump el 15 de septiembre.
Routh fue acusado de posesión de un arma de fuego por parte de un delincuente convicto y posesión de un arma de fuego con un número de serie borrado. Compareció ante un tribunal de Florida el lunes y se ordenó su detención en espera de juicio, reseñó Telemundo 51.
Un expediente judicial del lunes decía que Routh, que fue arrestado el 15 de septiembre, dejó una carta este mes dirigida a “The World” y declaró: “Este fue un intento de asesinato contra Donald Trump, pero le fallé”.
Un civil se puso en contacto con las autoridades el miércoles y dijo que Routh había dejado en su residencia una caja que contenía la carta, cuatro teléfonos, municiones y otras notas, según el expediente.