(31 de marzo del 2022. El Venezolano).- Control Ciudadano señala que el número de las empresas militares llega a 44. La Organización No Gubernamental (ONG) sostiene que estas corporaciones no son capaces de exhibir dividendos ni tampoco trasparencia pública sobre su gestión.
En el informe «El Crecimiento de la red de empresas militares en Venezuela. ¿Hacia dónde va la FANB?», difundido este jueves 31 de marzo, la organización que preside la abogada Rocío San Miguel destaca las características comunes de los órganos desconcentrados, entes descentralizados, empresas del Estado, institutos autónomos y fundaciones del Estado, adscritos al Ministerio de la Defensa.
Así, por ejemplo, Camimpeg, empresa para comercialización y servicios para la industria petrolera, minera y de gasde minería, y EmasProforn, empresa para el aprovechamiento sustentable de productos forestales y recursos naturales, tienen funciones de explotación ambiental «irreconciliable con la función de guardería ambiental que tiene asignada la institución militar».
Control Ciudadano, en su informe, expresa que las competencias, biuenes y servicios de las empresas militares «no están solo dirigidos, hacia la Fuerza Armada Nacional y los efectivos militares, sino en la mayoría de los casos al público en general, lucro y explotación de bienes públicos y recursos naturales. Y en algunos casos orientados al mercado nacional e internacional».
La organización advierte que, pese a la proliferación y competencias asignadas, las empresas de la FAN no satisfacen las demandas logísticas propias de la organización castrense y tampoco hay evidencia de que hayan motorizado la economía productiva del Estado y el desarrollo integral de la nación, o aumentado el apresto operacional de los componentes armados.
Control Ciudadano puntualiza que las 44 empresas de la FAN «son un archipiélago de empresas creadas para manejar recursos, con amplios márgenes de discrecionalidad, repitiéndose casi todas, en la misión estatutaria que tienen establecida».
La ONG refiere que, luego del primer informe sobre las empresas de 2018, fue creada la Empresa Militar para el Aprovechamiento Sustentable de Productos Forestales y Recursos Naturales, S.A., (Emasproforn) en diciembre de 2020. A esto se suma, señala el informe, el servicio desconcentrado para la gestión y administración de las zonas económicas especiales militares de carácter industrial y productivo de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.
«Parte de la burocracia de empresas militares, ya existía previo a la llegada de Hugo Chávez Frías al poder en 1998, sin embargo, durante su gobierno se expandió, para consolidarse en la gestión de Nicolás Maduro y orientarse hacia la explotación de actividades estratégicas asociadas al petróleo, los minerales, industria en general y servicios ambientales», apunta Control Ciudadano.